6) Limpieza de metales tóxicos: La realizamos con quelantes naturales. La intoxicación crónica por estos elementos es una de las condiciones médicas más subdiagnosticadas; muchas personas la padecen, y muy pocas lo saben, ya sea por falta del correcto diagnóstico o por desconocimiento de los médicos tratantes.

7) Reparación de la microbiota intestinal: Mediante el consumo de probióticos, prebióticos, polifenoles, ácidos grasos omega-3, entre otros.

8) Dosis terapéuticas de ciertos nutrientes, como el magnesio, la vitamina C, y las vitaminas del complejo B.

9) Oxigenación celular: Con clorofila, ozono, jugos verdes, ejercicio físico habitual y técnicas de respiración profunda.

10) Tratamientos de condiciones o enfermedades concomitantes: Terapias de manejo del estrés emocional, uso de adaptógenos, uso de plantas medicinales, tratamientos específicos para mejorar la función tiroidea, tratamientos para mejorar la circulación sanguínea, el drenaje linfático, la función hepática, entre otros.

Estos métodos conforman “el todo” de nuestros protocolos y tratamientos. Con todo, a cada quien lo que necesita; quiero decir: Dentro de nuestros pilares siempre destacamos el hecho de que, puesto que cada caso es distinto, se necesita un abordaje individualizado. Este es el principal fundamento de Protocolos CANA. Por consiguiente, el mejor tratamiento, una vez bien asentadas las bases, es el tratamiento personalizado.