Tradicionalmente, se ha recomendado una proporción de 2:1 de calcio a magnesio (es decir, el doble de calcio que de magnesio). Sin embargo, investigaciones más recientes sugieren que esta proporción podría ser demasiado alta, especialmente en el contexto de dietas modernas que a menudo son altas en calcio [3].

Algunos expertos ahora abogan por una proporción de 1:1, o incluso ligeramente a favor del magnesio, especialmente para personas que ya consumen mucho calcio a través de lácteos u otros alimentos fortificados [4].


El mito del 5:1

Algunos sugieren que para que el magnesio se absorba bien en presencia de calcio, la relación magnesio-calcio debe ser 5:1, es decir, 5 veces más magnesio que calcio (por ejemplo, 500 mg de magnesio frente a 100 mg de calcio). No obstante, no hay evidencia científica sólida que respalde esta idea. Esta afirmación parece ser una exageración o una mala interpretación de las investigaciones sobre la interacción entre estos dos minerales.

La proporción de 2:1 de calcio a magnesio (el doble de calcio que de magnesio) ha sido la recomendación tradicional durante mucho tiempo. Pero las investigaciones más recientes sugieren que una proporción de 2:1 podría ser demasiado alta, especialmente en dietas occidentales que ya suelen ser ricas en calcio. Como he dicho, algunos expertos proponen una proporción de 2:1 a favor del magnesio (el doble de magnesio que de calcio), para optimizar la absorción de ambos minerales y prevenir deficiencias de magnesio, lo cual parece ser mucho mejor. Protocolos CANA está de acuerdo con esta propuesta.