• Cubre tu cabeza y el recipiente con la toalla grande, creando una especie de “tienda” que atrape y concentre el vapor.

  • Cierra los ojos para protegerlos de la irritación del vapor y los aceites esenciales.

  • Inhala el vapor profundamente por la nariz y la boca durante 5 a 10 minutos. Respira lenta y profundamente, haciendo pausas si sientes necesidad de tomar aire fresco.

  • Si el vapor se vuelve demasiado intenso o el calor excesivo, levanta la toalla por un momento o retira tu cara ligeramente.

  • Finalización:
    • Al cabo de 5-10 minutos, o cuando el vapor disminuya significativamente, retira la toalla y endereza tu cabeza.
    • Puedes limpiar tu rostro con un paño suave o lavarlo con agua fresca.
    • Desecha las hojas y el agua de manera segura.
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