• Precaución: No se recomienda el consumo de infusiones de eucalipto en mujeres embarazadas o lactantes, niños pequeños, y personas con enfermedades hepáticas o gastrointestinales sin consultar a un médico. El aceite esencial de eucalipto en grandes cantidades es tóxico. Asegúrate de que las hojas que uses sean de eucalipto y no de otra planta similar.

  • Calidad del agua: Usar agua filtrada mejorará el sabor de tu infusión.

  • Para inhalación: Si tu objetivo es principalmente descongestionar, puedes preparar la infusión y luego, mientras aún está caliente y humeante, inclinarte sobre la taza con una toalla sobre tu cabeza para inhalar el vapor. Mantén una distancia segura para evitar quemaduras.

  • Para más información o asesoría, contacta al equipo de Protocolos CANA.