• Cada fase dura un mes, por lo que la duración de todo este proceso es de 6 meses; porque la fase 4 es la única que dura más de un mes. Además de esto, otros hábitos quedan implícitos, como la exposición frecuente a la luz solar (helioterapia), los ayunos frecuentes y no solo durante las dos primeras fases (aunque sí descansaremos de estos en la tercera fase), el hacer contacto con el suelo, el comer según el ritmo circadiano, el ejercicio físico regular, entre otros.

  • Entre cada fase no habrá pausa; terminada la una, empieza la otra. Sin embargo, en el caso de la limpieza de metales tóxicos, nuestra propuesta es hacerla en tres períodos de dos semanas, dejando una semana de descanso entre cada una. En las semanas de descanso se busca vigorizar y robustecer al paciente, ya que suelen perderse metales esenciales en el proceso de quelación, lo que por sí solo puede generar síntomas. Así que puede haber dos clases de síntomas según su origen en esta fase: 1) Los que son producidos por la movilización de metales tóxicos por la sangre, y 2) los que se producen por la excreción de metales esenciales. En total, incluyendo los descansos, se van 9 semanas en este proceso.

  • Ya que el paciente pudiera tener alguna condición médica que le prohíba tomar o hacer alguna de estas cosas, o por el contrario, que requiera que se añadan otras indicaciones, lo mejor es considerar cada caso en particular para darle un tratamiento eficaz. Por ejemplo, en este protocolo no se consideran específicamente los trastornos de circulación sanguínea, ni la diabetes, ni la obesidad, ni otras muchas condiciones médicas. Por consiguiente, al emprender este protocolo de la mano de Protocolos CANA, daremos consideraciones especiales al caso en cuestión.

  • La ozonoterapia y las megadosis de vitamina C también forman parte de los tratamientos que aceptamos y aplicamos. No se mencionaron explícitamente en ninguna de las fases de este protocolo, pero si es conveniente y el paciente tiene acceso a estas herramientas, se le guiará en su inserción en alguna fase del protocolo, sobre todo en la tercera y quinta fases de este. No obstante, aunque son recomendables y muy útiles, comprendemos que no todos los casos ameritan estas intervenciones. Por lo cual, si se han de usar o no, y en qué momento se han de usar, se determinará en el transcurso del protocolo.

  • Este es un resumen del protocolo maestro de Protocolos CANA. Son 6 meses de inversión en tu salud que valdrán toda la pena. Para obtener el protocolo detallado, ingresa en la página de “servicios”, y solicítalo desde allí. Ante cualquier duda, haz las consultas que necesites sobre el tema con el equipo de Protocolos CANA, y gustosos te las aclararemos.