Protección contra el daño hepático: Al mejorar la capacidad antioxidante y promover la conjugación de toxinas, el MSM puede ayudar a proteger el hígado del daño causado por sustancias tóxicas, como metales pesados, alcohol, medicamentos y contaminantes ambientales. Estudios in vitro e in vivo han demostrado que el MSM puede reducir el estrés oxidativo y la inflamación en el hígado16, 17, 18.
Mejora de la permeabilidad celular: Se ha sugerido que el MSM podría mejorar la permeabilidad de las membranas celulares. Si bien esto puede beneficiar la absorción de nutrientes, también podría, en teoría, facilitar la eliminación de toxinas almacenadas en las células.
Dosis y contraindicaciones
La dosis recomendada de MSM varía según la condición que se esté tratando. En general, se recomiendan dosis de 1 a 6 gramos por día, divididas en varias tomas4. Estudios han demostrado que el MSM es generalmente seguro y bien tolerado, incluso a dosis más altas, con efectos secundarios mínimos5. Sin embargo, algunos efectos secundarios leves pueden incluir malestar estomacal, diarrea, dolor de cabeza y erupciones cutáneas1.
El MSM está contraindicado en personas con alergia al azufre o con antecedentes de cálculos renales. También se recomienda precaución en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, ya que no hay suficiente evidencia científica sobre la seguridad del MSM en estas poblaciones.