• Restricciones regulatorias: En algunos países, como Dinamarca, se ha prohibido la Ashwagandha debido a sus posibles efectos hormonales y su capacidad para inducir el aborto3. El Instituto Federal Alemán de Evaluación de Riesgos (BfR) recomienda que los niños, las mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, y las personas con enfermedades hepáticas eviten los suplementos de Ashwagandha43.

  • Es fundamental consultar con un profesional de la salud antes de tomar Ashwagandha, especialmente si se está tomando algún medicamento o se padece alguna condición médica.


    Futuro de la investigación

    A pesar de la creciente evidencia que respalda los beneficios de la Ashwagandha, se necesita más investigación para comprender completamente sus mecanismos de acción, determinar las dosis óptimas para diferentes condiciones y evaluar su seguridad a largo plazo. Los estudios futuros deberían centrarse en: