Además, sus posibles efectos antiinflamatorios pueden ser relevantes, ya que la inflamación se reconoce cada vez más como un factor que contribuye a la depresión8. Estudios en personas con trastorno bipolar y ansiedad proporcionan evidencia adicional de que la Ashwagandha puede ser una herramienta valiosa en el manejo de los trastornos del estado de ánimo8.

Efectos sobre el insomnio

La Ashwagandha también ha demostrado ser beneficiosa para mejorar la calidad del sueño, especialmente en adultos con insomnio14. Un estudio con 80 participantes exploró cómo el extracto de raíz de Ashwagandha afectó el sueño en personas con y sin insomnio, lo que condujo a mejoras significativas en el sueño, especialmente para las personas con insomnio15. Se observó que la Ashwagandha ayudó a los participantes a conciliar el sueño más rápido, mejoró la calidad del sueño, aumentó el tiempo total de sueño y redujo el tiempo que pasaban despiertos en la cama16.

Otro estudio con 60 participantes que tomaron cápsulas de Ashwagandha o un placebo durante 10 semanas concluyó que la Ashwagandha redujo notablemente el tiempo que tardaron en dormirse y mejoró la eficiencia y la calidad del sueño15. Los estudios en animales sugieren que la Ashwagandha puede afectar los receptores del neurotransmisor GABA en el cerebro, promoviendo el sueño16. Un componente activo de la Ashwagandha, el trietilenglicol, ha demostrado aumentar el sueño sin movimientos oculares rápidos en ratones16.