Estancamiento y frío → algo picante o rubefaciente.
Excesos (diarrea, sangrado menor, fluidos corporales) → astringentes puntuales.
Combina por equilibrio: Una fórmula casera típica equilibra 1 amargo (encender) + 1 carminativo (mover) + 1 demulcente (proteger).
Empieza bajo y observa: La respuesta del cuerpo es tu mejor guía: alivio, calor, sed, cambios en heces, sueño, etc.
Evita extremos y respeta las pausas: Rotar familias sensoriales ayuda a no sobrecargar sistemas (p. ej., exceso de amargos o de picantes).
Revisa contraindicaciones personales: Embarazo, lactancia, cálculos, úlcera, medicación (anticoagulantes, antidiabéticos, antihipertensivos).