Cómo y por qué beneficia:

  • Estimulan la actividad de ciertas enzimas hepáticas que regulan la transformación de los estrógenos, haciendo que el cuerpo los procese por una vía más segura, conocida como la 2-hidroxilación.

  • Esto genera metabolitos estrogénicos menos activos, lo que protege el útero, los ovarios y los senos del exceso hormonal.

  • Favorecen el equilibrio entre estrógenos y progesterona, reduciendo síntomas como la tensión mamaria, los cambios de humor premenstruales y el crecimiento de quistes o miomas.

Cómo tomarla:

  • En el caso del DIM, de 100 a 200 mg por día.