9.4 Neurociencia y enfermedades neurodegenerativas
El cerebro es altamente dependiente de energía y sensible a la pérdida de NAD. Se ha demostrado que:
La caída de NAD contribuye a estrés oxidativo neuronal y disfunción mitocondrial.
En modelos animales, elevar NAD mejora la memoria y reduce la neurodegeneración en Alzheimer y Parkinson.
En humanos, los ensayos aún son preliminares, pero la suplementación con NR ha mostrado reducción de marcadores inflamatorios y tendencia a mejorar la función cognitiva [47, 54].
Esto convierte al NAD en una diana prometedora para enfermedades neurodegenerativas.